Otra noche, una más, los veteranos de la Compañía de Esquiadores Escaladores 51 intercambiamos bromas,
experiencias y sensaciones. No ocurre todos los días, pero algunas veces
parecería que nos convoca un atávica señal de la luna. Cómo si el
ancestral cuerno, entonado en nuestras amadas cumbres y montes bocineros, nos
señalara el advenimiento de algo vital.
Esta vez el guía, el
responsable de este toque ha sido la persona que junto con nosotros, los ahora
veteranos, inició la andadura de la Compañía por los senderos de la historia.
Todos sabemos que en 1995 desapareció como Unidad, pero nuestro último Capitán,
Ángel Atares, cumpliendo arcanas órdenes, puso en el fraternal regazo de la Compañía de Esquiadores de Viella nuestras enseñas y bandera. Una tradición y un gran honor que hoy en día sigue manteniendo con orgullo como responsable definitivo de la Compañía. De esta manera, de vez en cuando, encuentra unas horas para compartir en el cuartel de San Bernardo, en Jaca, sede de la Cía. de Esquiadores Escaladores 1/64, donde se custodian nuestros emblemas.
Los ve, los mira y recuerda. Siente, como todos nosotros, que son parte importante de su vida. Ello le autoriza a ser el guardián moral de nuestra agrupación.
En el foro expuso una reflexión, como un compañero más, desde el corazón, a sabiendas de lo que podía ocurrir y no hizo falta nada más.
Los ve, los mira y recuerda. Siente, como todos nosotros, que son parte importante de su vida. Ello le autoriza a ser el guardián moral de nuestra agrupación.
En el foro expuso una reflexión, como un compañero más, desde el corazón, a sabiendas de lo que podía ocurrir y no hizo falta nada más.
Brotamos de nuestros
agujeros y fluimos en la red. Contamos secretos sólo conocidos por nuestros
pares. Y aunque él y sus Subordinados se encargaron de forjar, primero nuestro
cuerpo y más adelante el espíritu, no podemos desoír la llamada al alma que
supone el compartir también sentimientos. Porque estos cuerpos acerados en su
día, no saben esconderse, ni pueden
resignarse a un efecto secundario con el que nadie contábamos: el
orgullo de haber pertenecido a esta Compañía y la metamorfosis que provocó en
nosotros.
Estas líneas son la
expresión de todos y cada uno de nosotros. Las difundimos y defenderemos a
capa y espada. Pachu cogió el lápiz, pero lo empujábamos sus iguales. No hemos podido dejar de
compartir semejante carta, humedecida su pluma en nuestros sentimientos y escrita desde su corazón.
Pachu, veterano del 86:
Mi “Capitán” la gente no
puede entender que es lo que se siente al haber pertenecido a la Compañía.
Igual que a algunos hacerles sentir lo que tú por tu perro, si nunca
tuvieron uno.
Pudiendo hacer una mili
"fácil", según ellos, como podía haber sido mi caso (en Araca estuve
en la Plana Mayor por haber hecho administrativo) y el mismo día que supe mi
destino, cojonudo según alguno de mis compañeros de la Plana, me apuntase a las
pruebas físicas de la Compañía de Esquiadores Escaladores, sin dudarlo, sin haber
visto diapositivas ni ir a la charla de captación.
Más adelante darlo todo para
que no me tirasen en las pruebas físicas, la alegría de ser seleccionado, de
los nervios en Burgos al pasar el reconocimiento, y el orgullo de poner el
cuño de CAMBIO DE DESTINO: Cia. Esquiadores Escaladores.
Mío y de todos mis
compañeros del 86: Los nervios al llegar a la barrera de Aizoaín, de las
voces de algún Veterano, lo duro de los barrigazos , la pista americana y la
gimnasia; de la Prueba de la Boina, del curso de esquí en Reinosa con las
risas, el frío de las guardias en los camiones, de la marcha por el Pirineo
navarro con la mochila atrás; por cierto, que casi era mayor que yo; y el PRC delante. (12 kgrs. más ).
Era el más pequeño del 86 y con el teniente Ortiz diciéndote: Muñiz tu aquí, a mi lado.
Era el más pequeño del 86 y con el teniente Ortiz diciéndote: Muñiz tu aquí, a mi lado.
Ver que podías seguir al
día siguiente, a pesar de las ampollas en los pies curadas con hilo y pinchando
mercromina, de la ayuda de los Veteranos al decirte como se colocaban las cosas
en la Altus. Aquí tengo que mencionar a uno en especial, Rey .
Del curso de helicópteros en
Agoncillo que tanto disfruté, de la llegada de los nuevos, Kepa San Blas y
otros muchos de los cuales con el paso de los tiempos olvide su nombre, pero
que gracias a este Facebook he ido recuperando.
Y que después de casi ya una vida, aún lleves
al monte un forro polar en el que en el hombro llevas cosido el parche de la
Compañía, de explicarle a muchas personas que encuentras por el monte, que las cosas que llevas en la mochila, por ejemplo un bote con material de supervivencia,
son normas que aprendiste hace mucho tiempo en un sitio llamado Compañía de
Esquiadores Escaladores 51.
De sentirte orgulloso de
ponerte la Boina, ahora recuperada gracias a gente como Juan Florencio, que igual
que yo, sienten los mismo a pesar de haber pasado ya muchos años.
Todo esto y muchas cosas no lo podrán entender la gente que no paso por la Cía. Esquiadores Escaladores y vivió las cosas tan duras y hermosas que compartimos. Y que sin duda nos sentimos a día de hoy con autoridad para decir a todo el mundo:
Todo esto y muchas cosas no lo podrán entender la gente que no paso por la Cía. Esquiadores Escaladores y vivió las cosas tan duras y hermosas que compartimos. Y que sin duda nos sentimos a día de hoy con autoridad para decir a todo el mundo:
"YO
ESTUVE EN LA COMPAÑÍA DE ESQUIADORES ESCALADORES DE LA DIVISIÓN DE MONTAÑA
NAVARRA”
Algunas veces lo que se dice pierde protagonismo, en beneficio del autor de las manifestaciones. En otras la persona que hace la reflexión engrandece lo expuesto. Y cuando se habla con conocimiento de causa, la autoridad es incontestable. En el momento que alguien que ha extraído el mineral de las entrañas de la tierra con sus propias manos, te habla de palabras como desafío, dureza, condiciones extremas y compañerismo, creo que su opinión es digna de ser oída y respetada, ya que su experiencia lo legitima a hablar.
Nada podemos añadir a esta
acertada reflexión de nuestro compañero Pachu, sólo disfrutarla con vosotros y el que quiera, porque las cosas que salen de dentro son patrimonio
de todos.
Un abrazo compañeros.
Pachu y otros veteranos del 86. |
Un abrazo compañeros.