Momentos (4)

Los toques de diana, que te  tenías que vestir en un plis-plas para formar en la puerta a los pocos minutos, a toda velocidad corriendo por las escaleras. Cuando volvimos del curso de escalada, en Julio, las ordenanzas cambiaron, ahora se se formaba hasta media hora después del toque.

Cuando me tocaba cabo cuartel y tenías que hacer el parte: cama s, taquillas, mantas, enchufes, interruptores…

Los movimientos en formación, a paso ligero,  para ir al comedor.

Cuando tenías que poner una colcha nueva  por la mañana, y por la noche tenías que devolverla y poner otra vez la vieja.

Las revistas de equipo. Como saltaban cantimploras, navajas, y otro equipo,  de cama a cama, según se hacia la revista.

Las revistas de limpieza, con la prueba del algodón, como en el anuncio. Los mandos siempre ponían la mano en algún sitio que seguro tu no habías limpiado.

Esas entradas al cuartel, después del orden de combate, en  formación, a paso ligero y cantando.

Ir al desayuno, leche chocolateada al cacao y galletas ¿Pero qué es eso que flota en las tazas? Y te dice el oficial de cocinas que ha habido un accidente y han caído algunas moscas en la leche, pero que como se ha hervido no pasa nada, que se retiraran y nos bebiéramos la leche, o si no… 6 moscas en mi taza.

La formación de antes de comer, siempre me pasaba lo mismo, no me daba tiempo…siempre tenía que ir sin poder lavarme las manos, llenas de betún.

Cuando venias del orden de combate, lleno de barro y por la tarde, ya seca la ropa, tenías que quitar el barro a base de cepillo de raíces, que por supuesto, tenías que comprar tú. Ya nos lo recordaba el Teniente Clares, que la paga que percibíamos era para eso, betún, hilo para coser y otras necesidades.

Ir de compras por Pamplona, en el tiempo de paseo, para hacerte de lo necesario para la bolsa de emergencia que tenías que llevar.

Esos escaqueos. Te haces un maestro en eso.

El día de paga y decirte el Brigada que tenías que ir con tanto dinero suelto si querías cobrar. Recuerdo que ese día, además, ponía el tenderete.

Las imitaciones del Brigada Palma a cargo de Bafalui, instado por los mandos. Hasta el Brigada se reía.

Cuando en nuestro salón de actos se hacían los consejos de guerra. Era allí donde se hacían los juicios de los militares en Pamplona.

El almacén de Mayoría, donde podías comprar de todo: hombreras verdes, calcetines, calzoncillos…, hasta unos esquís.

3 de la madrugada, fuera este cayendo una fuerte tormenta, nos despertamos, hay ruido. Vuelven los arrestados a pelote (Pelotón de Castigo), empapados, llenos de barro, muy cansados (lo que se dice derrotados). En silencio se quitan la ropa y al catre.

Al Teniente Cerezo  afeando al soldado Bonillo que llevaba muy mal el uniforme, indicándole todo lo que estaba mal, cogerlo por la manga y …, quedarse con ella en la mano, … que cara puso, indescriptible, entre asombro, sorpresa, indignación, etc. Los demás no parábamos de reír, entre dientes, pero reír.

La despedida de soltero  del Teniente Cerezo…A la mañana siguiente  el orden de combate consistió en una agradable paseo por el cuartel.

Esta foto es de aquella mañana de resaca.

7 de la mañana, toda la noche andado por el monte,  muy cansados, de vuelta en el cuartel y a desayunar. Fue el mejor desayuno de la “mili”: Churros, huevos  fritos, tocineta, consomé, leche chocolateada.  Y además, después nos íbamos de permiso…

Maniobras de guerrilla, ultimo día, por la noche…barbacoa en el monte.

Esta foto es de aquellas maniobras de guerrilla

Merienda especial. La Compañía había ganado 3 jamones en las competiciones por el Día de la Patrona. Ahí todos, alrededor de las fuentes…el jamón fue visto y no visto. Con los huesos de esos jamones se hizo el consomé del desayuno antes relatado.

El Capitán, cuando nos decía que si alguien se siente mal no tiene que ir a las formación, que debe de acostarse…

Como colaboraban los veteranos a las ordenes de cabos conejos en las guardias, que obedientes eran.

Arriar bandera con la gorra puesta.

Esos tiros que se escapaban en la revisión de armas al reemplazar las garitas, antes de entrar de nuevo al cuerpo de guardia...

Meter la baqueta en el fusil antes de ordenar retirar el cargador...

No estar seguro si tienes que mandar derecha o izquierda...

Momentos (3)

Curso de escalada en el campamento El Carrascal, todo un viaje al pasado: barracones, techos de uralita, aseos de los de antes y una carretera publica atravesando el campamento.

Antes de ir al curso no hemos preparado en Aizoain, un anillo y mosqueton para cada uno, para aprender a hacer nudos.

El primer rappel, todos lo hacían mirando hacia la montaña, paso a paso. Yo lo hago de lado y corriendo a saltos. Todos mirándose sorprendidos (era la primera vez que hacia un rappel)...suficiente para que el Sargento Campos tenga que demostrar que el lo sabe hacer mejor, atado por detrás, bajando de frente, a toda velocidad.

Ya estamos en El Carrascal y empezamos a apreciar las "comodidades" de nuestros alojamientos.

Las palas y los picos habían sido traídos en unos grandes cajones de madera, aquí también habría "pelote".

Después de comer obligatorio hacer siesta. Estamos en verano.

Los aseos: un cauce pasa bajo el agujero del cagadero. Cada semana era des infectado con cal.

La primera vez que vuelas cuando te caes. Ese "gustillo" que entra por tu cuerpo.

Preparado, Listo, Voy, Ven..., las palabras "mágicas" entre el que sube  y el que asegura arriba.

Cuando todos los veteranos se caen en una vía, y vas tu, un "conejo", y la pasas como si nada. Mosqueo general en los veteranos y pelea entre ellos para ver quien es el primero en pasarla. Si un "conejo" puede, un veterano no puede ser menos.

Los gritos de terror de JBL, un veterano particularmente molesto con los "conejos", cuando se cae por primera vez. Como disfrutábamos los "conejos".

Como pegaba el Sol en las marchas.

El túnel bajo la autopista, cantando el mambo...

Copa de Europa de selecciones, semifinales España-Alemania, el comedor abarrotado. Gana España,... la fiesta posterior, memorable, todos borrachos.

Tarde de paseo por Pamplona, hacemos el viaje en el coche de un compañero. El veterano JBL se nos engancha subiendo al coche. "como un colega mas". Que cosas. 

Formación de retreta, el furriel dice las ordenanzas para el día posterior..., capitán de cuartel Don Hamadi Mohamed Chej Mohamed Lami (o algo parecido). No dábamos crédito a nuestros oídos, ¡carcajadas!... ¿se habrá equivocado el furriel? ¿es una broma?... No es una broma, para los que no eramos del Batallón Estella fue una sorprendente novedad.

Otra formación, antes de salir de paseo. El Capitán Lete llama a JBL. Se lo llevaba a Aizoain, directo al calabozo del cuartel de artillería. Sus andanzas martirizando a los "conejos" se terminan. No se licenciaría con sus compañeros de reemplazo. Satisfacción en los "conejos".

Tarde de fin de semana en los barracones. Algunos veteranos, aburridos, les da por tomarla con los extintores. Resultado: entre todos los del barracon tenemos que pagar los extintores, ¡que bien!

Pamplona en el inicio del verano es preciosa, todo verde y ambiente pre San Fermines en la calles.

Campanas, el del vino, el pueblo mas cercano al cuartel. A el íbamos a coger el autobús hacia Pamplona.

Tafalla, tarde de paseo en otra localidad cercana a la que se podía ir andando.

Estoy de guardia y me toca acompañar a un repartidor que tenia que dejar mercancía en cocina. Me subo a su camión y me cuenta que el también hizo la mili en El Carrascal, que se acuerda del Capitán Hamadi.

Otra guardia. Tengo que buscar a un teniente de una de las secciones que hacían el curso, le llamaban los padres de un soldado accidentado durante el curso.

Como en Aizoain, por las mañanas ejercicio. La carrera con el Sargento (por cierto, no era de nuestra compañía, había sido asignado como refuerzo) por los campos aledaños al campamento. Nos acercábamos al fin y dice: vamos, un sprint..., corremos como posesos... y cuando ya no podemos mas y vamos a aflojar va y dice: otro sprint..., jo..., creí que no podría, pero todos lo hicimos.

Durante el curso aconteció la "revista anual de chopo". Ingenieros del Ejercito revisarían los CETME. Tocaba limpieza mas concienzuda del arma antes de la revista.

Últimos días, viene el General de la División. Libertad para escalar. Están asignando las patrullas y las paredes, tenia esperanzas, pero al final me toca hacer vigilancia.

Demostración al General a cargo de "Harold", un semi-veterano (normalmente eran 2 reemplazos por año los que eran destinados, pero no se sabe muy bien, ese año, después del 6º/83, y antes del 2º/84, el mio, hubo un reemplazo intermedio, con menos soldados) que era escalador, vamos..., Spiderman comparado con los demás. Todos, y también el General, embobados con la exibicion.

Desfile en el campamento, en camisa y con el fusil colgado del brazo. Días antes habíamos ensayado el cuelgue del fusil. Decían nuestros sargentos, cuando paséis ante el general le mirais con chulería y cara de mala leche.

Nueva exibicion en las paredes, esta vez a cargo de los bomberos de Pamplona. Una delicia, superaban a "Harold".

De vuelta en Aizoain, se acercan los San Fermines.

Continuara...

J.Florencio, 2º/84.